Defensa antilascasiana del dominio español en el Nuevo Mundo
Bernardo de Vargas Machuca, Apologías y discurssos de las conquistas occidentales. s. XVII. Descripción:[1] h.+VIII f.+171 f.+[2] h.: papel ; 149x200 mm. Enc. en perg. col. verde con orla y hierros dorados en planos y monograma central de Uceda, lomera cuajada, hierros dorados en cantos y cortes jaspeados en rojo y azul. Olim: VIII-K-3, 2-K-6, II-D-10
Signatura: II/2965
Procedencia: Biblioteca del duque de Uceda, hoy en BNE en su mayor parte, muy pbte ingresado este ms. en 1807 con los fondos de la Secretaría de Gracia y Justicia de Indias
Bernardo de Vargas Machuca (1555-1622) fue militar, tratadista y escritor. Sus primeros viajes por Nueva España estuvieron siempre al servicio militar del rey contra los ataques piráticos. Residió luego en Tunja, donde fue nombrado capitán de caballería. Estuvo enonces activo en Nueva Granada en diversidad de acciones contra comunidades belicosas locales para pacificar el control hispano, y protagonizó expediciones diversas. Esa trayectoria le valió para ser nombrado de alcalde mayor de Portobelo y comisario de fortificaciones, aunque su carrera, pese a sus méritos, fue siempre dificultosa, siendo objeto incluso de multas por apreciársele siempre desde los burócratas de la Corona más lo negativo que lo aportativo de su servicio real. De hecho, ssiempre pretendía sin éxito más de lo que obtenía de la Corona. Poco antes de morir en 1622, obtuvo al fin la gobernación de Antioquia, pero tras vender bienes para poder asumir el cargo, falleciendo en Madrid antes de partir. Con su larga trayectoria militar y de gobierno local en Indias, adquirió experiencias y saberes, que volcó en la escritura.
Su obra Apologías y discurso de las conquistas occidentales supone una obra capital en cuestiones de la conquista y es complementaria de la Milicia y descripción de las Indias, publicada en Madrid en 1599. Vargas Machuca plasma en este manuscrito sus impresiones acerca de las tierras y habitantes con los que lucha, pues suponen ser los grupos indígenas más hostiles. Pese a que no participó en las primeras grandes conquistas, si lucha contra los más belicosos pueblos posteriores a la conquista, como eran entre otros los de Nueva Granada. Vargas Machuca se apoya en su obra sobre Juan Ginés de Sepúlveda para razonar el dominio español sobre el territorio americano, alegando el derecho legal de conquista.
El manuscrito trata, según la intención de Machuca, de refutar las ideas que plasmó Bartolomé de Las Casas en Brevísima relación de la destrucción de las Indias y por ello antes de los discursos apologéticos, en una sección preliminar que denomina “Controversias”, hay doce objeciones a polémicas lascasianas y otras en relación a la conquista y aspectos posteriores a la misma. Sigue una exhortación al lector y ya luego los “discursos y apologías”, cinco, donde aborda las conquistas de la isla de la Española, Nueva España, el Perú, Chile y Nueva Granada. Tras el primer discurso hay un anexo rebatiendo a Las Casas en sus críticas a las conquistas americanas de S.M, respondiendo a ellas “en descargo” aunque la exhortación y el conjunto de los discursos tienen ya de trasfondo ese rebatimiento.
El manuscrito es una versión muy avanzada en su composición pues lleva paratextos preliminares nuncupatorios al autor en elogio suyo, poesía laudatorios y otros similares, como estado previo a ser llevado a imprenta, pero no lleva al pie de cada hoja el rubro del escribano de Cámara del Consejo Real, lo que autorizaba ser llevado a la imprenta tras comprobar el escribano que concordaba con el texto original, siendo todavía de trabajo pues hay numerosas tachaduras y correcciones. De hecho quedó inédito hasta 1889 en que se insertó en la Colección de documentos inéditos para la Historia de España, editándose en edición científica con estudio en Valladolid en 1993. Se dedica la obra en el manuscrito al marqués de Montesclaros, don Juan de Mendoza, en su tiempo de virrey del Perú (1607-1615), tras serlo antes de Nueva España. Siendo la obra dedicada a Montesclaros, no acabó en la biblioteca de la casa del Infantado con su archivo, pues el título acabó en la Casa del Infantado, sino que era del duque de Uceda -ignorándose cómo llegó a sus manos-, gran bibliófilo que siempre encuadernaba sus libros en pergamino verde con orlas doradas y su monograma al centro. Esta biblioteca fue incautada al definirse Uceda como austracista en 1711, tras ser virrey de Sicilia con Carlos II y servir a la nueva dinastía. Bajo Felipe V ya fue Uceda presidente del Consejo de Indias y por ello pudo permenacer luego en el Archivo del Consejo y pasar tiempo adelante a la Secretaría del Despacho Universal de las Indias, denominada en sus tiempos finales Secretaría de Gracia y Justicia, cuyos fondos entraron en la Librería de Cámara en 1807.
Dejó Vargas Machuca otro texto de materia indiana a su vez complementario de las dos obras suyas aquí referidas, Discursos sobre la pacificación y allanamiento de los indios de Chile, editado en 1888 por vez primera en Santiago de Chile por José Toribio Medina, y luego también en 1961. Su trilogía textual sobre las Indias forma un friso muy relevante para entender lo que militarmente supuso la conquista americana y sus complejidades de diversa índole: logísticas, de medios, de asentamiento posterior de la gobernación en los territorios, etc, constituyendo verdaderas fuentes al efecto al ser de primera mano.