Parte de Sermones que don Amaro de Espinosa Demente, que floreció en esta ciudad de Sevilla al fin del siglo passado decía con notable agudeza y gracia en los sitios públicos, quando salía a pedir limosna amarrado por la sintura a otro demente como se acostumbra en el hospital y cassa de San Marcos, donde se recojen los locos y para cuio efecto se elijen los que no son furiosos y tienen más donayre por lo mucho que aiuda este medio de acopiar limosnas para contribuir en parte a la manutención de estos pobre ynnocentes que lleban sus demandas de oja de lata fuertes y cerradas con sus candados donde la recojen de los fieles